Soñé que Lilah (mi gato egipcio) crecía tanto que se empezaba a parecer más bien a un Xoloescuincle. Se ponía morenito y ya no saltaba ni se escapaba. Ya se comportaba como un perro.
Alejandra Munguía: nació colmada de talentos —baila, canta, actúa, modela, diseña; pero entre todos sus talentos, el que más le admiro es esa capacidad que tiene ella de reírse a carcajadas de sí misma.